En octubre de 1980, Reina Isabel Peña, de 4 años, y su hermano Gregorio Benjamín Peña, de apenas 1 año, desaparecieron durante un operativo militar en Jutiapa, luego del asesinato de su madre.
Ambos fueron adoptados por distintas familias y crecieron separados, sin saber uno del otro.
Pasaron más de 33 años de incertidumbre y ausencia, pero el 29 de junio de 2013 finalmente se reencontraron en el Cantón El Zapote, en el municipio de Tejutepeque, departamento de Cabañas.
“Yo me siento feliz de haber encontrado a mi hermano. Yo me recordaba que él era colochito y morenito”, dijo Reina Isabel con profunda alegría.
Este reencuentro muestra que, aunque el tiempo pase, la esperanza de volver a estar juntos nunca desaparece.
